¿Acabas de comprar un departamento en una buena zona y estás listo para ponerlo en renta? Aquella es una gran forma de empezar en la inversión inmobiliaria. Tu principal preocupación debe ser conseguir buenos inquilinos, ya que no todas las personas lo son y algunos pueden causar muchos dolores de cabeza.
Una vez que encuentres uno confiable, rentar el inmueble requerirá muy poca participación de tu parte. La pregunta más importante aquí es: ¿cómo evitar malos inquilinos? Bien, en el siguiente artículo te ofrecemos siete consejos que podrían ayudarte.
1.- Investiga a quién estás alquilando
Antes de aceptar a la primera persona que llega a ti con ánimos de alquilar tu inmueble, es necesario que investigues a cada potencial inquilino. Para empezar, es importante que revises los antecedentes de crédito. ¿Cómo revisar la historia de crédito de una persona?
Bien, puedes hacerlo por medio de las centrales de riesgo que trabajan en el sistema financiero como, por ejemplo, Infocorp. Si bien se trata de un servicio de pago, es un costo que vale la pena, ya que te ayudará a evitar inquilinos morosos.
De esta forma, podrás conocer datos importantes para ti como: ¿Paga a tiempo? ¿Acostumbra pagar con retrasos? ¿Aún cuenta con deudas activas? También puedes solicitar que cada inquilino potencial te presente su historial de crédito, ya que la revisión es gratuita cuando se revisa el registro personal.
2.- Realiza preguntas previas
Ok, una vez que empieces a recibir en el departamento a las personas interesadas en el inmueble, es momento de que les hagas una serie de preguntas que te ayudarán a conocer mejor a cada posible inquilino.
Algunas de las dudas más importantes que debes resolver son: ¿cuál es el motivo por el que decide mudarse? ¿Se está mudando antes de que finalice el plazo de su alquiler actual? ¿Está muy apresurado por encontrar un departamento? ¿Esta es la primera vez que renta un inmueble?
De acuerdo a las respuestas, puedes identificar posibles dificultades con tu actual arrendatario. Esos son los inquilinos que necesitas evitar. Tienes que plantear estas interrogantes de forma casual, ya que no debe parecer un interrogatorio.
3.- Habla con el arrendador previo
Como lo expresamos en el punto anterior, debes preguntar si se trata de la primera vez que renta un departamento. ¿Para qué te servirá tal información? Si es que el potencial inquilino ha alquilado viviendas previamente, debes pedirle como referencia el número de la persona a que alquilaba su inmueble anterior.
Una de las mejores formas de evitar un mal arrendatario es comunicarte directamente con su arrendador previo para recibir sus impresiones sobre aquel candidato. Él podrá decirte de forma imparcial cómo es tener a esa persona de inquilino.
4.- Cobra la renta adecuada
Lo ideal es conseguir un equilibrio en el monto que cobras y hacer que resulte competitivo. Si la renta es muy baja, muestras falta de confianza en lo que ofreces y los inquilinos potenciales podrían creer que el inmueble tiene problemas o inconvenientes.
Por otra parte, si la suma es muy alta, el precio asustará a la mayoría de posibles inquilinos, quienes buscarán una opción algo más accesible. En su lugar, recibirás únicamente personas con problemas potenciales a quienes quizá no les importa la renta alta ya que no piensan pagarla.
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5.- No muestres los períodos de desocupación
No es recomendable dejar ver que tu inmueble ha permanecido desocupado por periodos muy prolongados. Por lo general, las personas que tienen mayores posibilidades de convertirse en inquilinos problemáticos suelen buscar departamentos con periodos extendidos de desocupación ya que hay mayores posibilidades de que el dueño esté dispuesto a bajar la renta.
Por eso, evita revelar signos de periodos prolongados de vacancia. Si optas por publicar anuncios, no muestres reducciones de precio. Asimismo, intenta que el inmueble se mantenga libre de polvo ya que no debe lucir como que ha pasado mucho tiempo sin inquilinos.
6.- Mantén tu propiedad en buen estado
No subestimes la importancia de mantener una buena apariencia en el departamento. Si una propiedad se encuentra bien conservada, los posibles inquilinos sabrán que tú, como el dueño, te preocupas por mantenerla en ese estado. De esa forma, muestras que te mantendrás vigilante ante cualquier problema que pueda surgir en el inmueble.
7.- Revisa las cláusulas del contrato
Es importante que seas claro en cuanto al término del contrato de alquiler. Coloca una fecha específica: día, mes y año y que no habrá derecho a prórroga. De esa forma, evitarás que un mal inquilino se aproveche de una cláusula poco clara para quedarse en tu inmueble más tiempo de lo deseado.
A menudo, algunos malos arrendatarios creen que hacer una mejora en el inmueble les da derecho a discutir una posible reducción en el monto de la renta o simplemente no pagarla. Para evitar problemas de ese tipo, no debes olvidar establecer una cláusula que prohíba la realización de mejoras en tu propiedad. Los cambios tienes que hacerlos tú.
Por otra parte, es importante que especifiques en el contrato que la persona con quien celebres el contrato no podrá ceder el alquiler a una tercera parte. Aquello te librará de problemas con personas a quienes no investigaste previamente. Existen muchas otras cláusulas importantes, pero estas son a las que debes prestar especial atención.
Ahora sabes cómo filtrar a los candidatos para obtener solo buenos inquilinos. Sigue estas recomendaciones y las posibilidades de que tengas una mala experiencia con tu arrendatario serán menores.
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